La lucha por una recomposición salarial sigue en marcha. El Sindicato de Trabajadores Autoconvocados de la Salud (Sitas) reunió esta mañana a profesionales de distintas localidades de la provincia en la plaza Independencia. La atención en los centros sanitarios públicos será limitada durante este miércoles, producto de la medida de fuerza.
“En el marco de una jornada nacional de salud, Sitas se expresa porque queremos dejar de tener salarios de pobre, de tener actualizaciones por debajo de la línea de pobreza y buscamos percibir salarios que sean dignos”, aseguró Julián Nassif, secretario general del gremio.
“Cada vez nos alejamos más de un salario básico y eso provoca que haya un mayor número de profesionales que egresan de la facultad de Medicina, piden certificación y se van del país”, expresó.
Participaron profesionales de Concepción, Santa Ana, Alberdi, Aguilares, Lastenia, entre otras localidades. Además, anunciaron una jornada de paro el día de hoy en los centros asistenciales durante 24 horas, donde sólo se atenderá urgencias.
Nassif reflexionó que el motivo de la manifestación es intentar que “el diálogo se pueda abrir y sea genuino”.
"No se ha cortado el diálogo"
La secretaria adjunta de Sitas, Adriana Bueno, expresó que “a nivel provincial no se ha cortado el diálogo y estamos siendo respetados en nuestras medidas de fuerza". "Ayer tuvimos una reunión con todo el gabinete de Salud y hablamos de muchos temas”, detalló.
El problema no es provincial, aseguró Guillermo Ramacciotti. “No hay que reducir la situación al ámbito provincial; esto es federal. El problema no está acá, sino en Capital Federal, donde atienden los dioses”, dijo.
Indicó que “hay una política nacional que lleva a todos los gremios del país a una debacle”, logrando que “el que trabaje, alcance la línea de pobreza”.
Además, enumeró los principales temas del reclamo. “El aumento no es aumento; existe una condición de deuda de dos años seguidos de casi un 40%; se retiró la cláusula gatillo -que nos aseguraba la tranquilidad de estar siempre un poco por encima de la inflación-; el 82% móvil fue aceptado en las Cámaras y vetado por la vicepresidenta (Cristina Kirchner); y la ley sanitaria que no se logra poner en vigencia”, detalló Ramacciotti.
Así lo reconoció Patricia Godoy, de Monteros. “La situación económica, la crisis y el poco reconocimiento que tuvo la Salud -no sólo en pandemia-, nos lleva a salir a la calle a manifestarnos nuevamente”, dijo a LA GACETA.
Comentó que ni siquiera dos ingresos de dinero no son suficientes para mantener a una familia. “Debemos trabajar en distintos lugares para subsistir y responder a las necesidades de nuestras familias. Aún así, arañando, podemos sobrevivir”, lamentó.
"Hay que sacrificarse haciendo recortes"
Walter Gramajo, por su parte, remarcó que se trata de una situación que con el tiempo se fue degradando. “Hay que sacrificarse haciendo recortes o buscando un segundo trabajo para no perder la calidad de vida que solías darle a tu familia. Por eso salimos a las calles; el salario tiene que alcanzar para lo mínimo indispensable”, compartió.
En este sentido, Roxana Díaz, de Famaillá, enmarcó una gran diferencia. “Nosotros no llegamos a la canasta básica, mientras que hay una diferencia enorme con los políticos. Ellos pueden darse la gran vida, ¿y nuestros hijos?”, aseveró.
Destacó que se trata de una “injusticia” ya que “fuimos los únicos que trabajaron en la pandemia arriesgando sus vidas y trabajando horas extra. Nadie más lo hizo y nosotros pusimos la cara”, fundamentó Díaz.
*Producción periodística: Bárbara Nieva